Son muchos los aspectos que influyen en la calidad del ambiente interior en los edificios. Podemos hablar de confort térmico, aprovechamiento de luz natural, calidad de las vistas hacia el exterior, protección frente al ruido o accesibilidad entre otros. Por supuesto, también la calidad del aire interior. En este artículo os presentamos las estrategias que propone LEED v4.1 para garantizar la calidad del aire interior en los edificios y por lo tanto el bienestar de los usuarios. Y también anunciamos la última versión del esquema LEED v5.
28-05-2024
¿Qué es LEED?
Explicado de una manera muy resumida, LEED es un sistema que permite certificar la sostenibilidad de los edificios. LEED es en inglés el acrónimo de Leadership in Energy and Environmental Design.
La versión más actual de LEED es la v5, aunque todavía no se pueden registrar proyectos con esta versión. Se trata de la más actualizada versión ya que incluye objetivos de descarbonización de edificios, conservación y restauración de los ecosistemas o aspectos como la equidad, la salud y la resiliencia.
Esquemas de certificación
LEED dispone de varios esquemas de certificación en función del uso del edificio y el alcance de la certificación:
1. BD+C. Diseño y Construcción de edificios. Para Obra Nueva y Rehabilitaciones Integrales de cualquier uso. Se aplica también en Núcleo y Envolvente y también para usos como Escuelas, Comercio minorista, Hostelería, Centros de datos, Almacenes y Centros de Distribución así como Centros Sanitarios.
2. ID+C. Diseño y Construcción de interiores. Se emplea para el acondicionamiento interior de edificios. Se utiliza en interiores de Edificios Terciarios, pero también se utiliza en Comercio minorista y en Hostelería.
3. O+M. Operaciones y Mantenimiento de Edificios. Sirve para edificios que se renuevan con mayor o menor alcance. Se emplea en Edificios Existentes y cuenta con variantes para Escuelas, Comercio minorista, Hostelería, Centros de Datos y Centros de Distribución.
4. ND. Desarrollo de barrios. Para proyectos urbanísticos en nuevos terrenos o de reurbanización. Pueden contener Uso Residencial, No Residencial o una mezcla de ambos.
5. Homes. Edificios Residenciales e incluye Viviendas Unifamiliares y Edificios Plurifamiliares. Para Edificios Plurifamiliares y Viviendas Unifamiliares de más de 4 alturas se puede utilizar como alternativa el sistema BD+C.
Categorías en el esquema BD+C v4.1
El esquema (Rating System) más genérico es el BD+C. Este esquema en la versión 4, incluye 8 categorías. Cada categoría contiene pre-requisitos y créditos, cada uno relacionado con un impacto ambiental asociado al edificio:
1. Localización y transporte asociado al edificio (LT).
2. Elección de la parcela con criterios de sostenibilidad (SS).
3. Eficiencia en el uso del agua (WE).
4. Eficiencia en el uso de la energía (E&A).
5. Elección de materiales y uso de los recursos (MR).
6. Calidad del ambiente interior (EQ).
7. Innovación en el diseño (IN).
8. Prioridad regional (RP).
Además de las 8 categorías, la versión LEED V4.1 incluye fuera de las ocho categorías:
1. Pre-requisito Planificación y Diseño Integrativo de Proyectos
2. Crédito Proceso integrado.
El objetivo de ambos consiste en garantizar el éxito de la certificación de la sostenibilidad con el sistema LEED. Su importancia radica en el hecho de que la sostenibilidad debe ser algo inherente a todo proyecto de diseño y construcción de un edificio, no un elemento añadido. Este crédito tiene como objetivo la aplicación correcta de la herramienta LEED.
La calidad del ambiente interior EQ en el esquema BD+C 4.1
Cada una de las categorías anteriores se califica con una puntuación. Esta valoración está basada en la importancia de dicha categoría según el impacto que sobre el medio ambiente y la salud de las personas lleva asociado.
Cuando se certifica un edificio con LEED se pueden alcanzar cuatro niveles de certificación. Cada nivel depende de la valoración final. Es por ello que cada categoría se cuantifica con una cantidad de puntos. Por ejemplo, se pueden alcanzar hasta 33 puntos y alguno extra en la categoría asociada al uso de la energía. Esta es la categoría más importante. Seguida por la categoría de calidad del ambiente interior, donde se pueden alcanzar hasta 16 puntos y algún punto extra por comportamiento ejemplar.
La categoría Calidad de ambiente interior EQ del esquema BC+C 4.1, incluye pre-requisitos y créditos relacionados con la calidad del aire interior.
En este post vamos a centrarnos en la importancia de la calidad del aire interior y las estrategias que propone LEED para su garantía.
Factores que influyen en la calidad del aire interior
La calidad del aire que respiramos en el interior de los edificios influye en nuestro bienestar. Y aunque no lo podamos percibir con la vista, existen diferentes aspectos que influyen en la calidad del aire: el humo del tabaco, las emisiones de los materiales de construcción, el radón del subsuelo, la calidad del aire exterior, la limpieza en conductos de ventilación o de las propias instalaciones, el control de la calidad del aire durante la ejecución de la obra, el uso de combustibles, la calidad del aire exterior o la actividad de las personas en los espacios interiores entre otros muchos.
LEED considera todos estos aspectos y propone una serie de estrategias para garantizar la calidad del aire interior y por lo tanto el confort de los usuarios.
Estrategias para la mejora de la calidad del aire interior
Dentro de la categoría de calidad del ambiente interior EQ del esquema BD+C 4.1 nos encontramos con dos pre-requisitos relativos a la calidad del aire interior. Se deben de cumplir sí o sí (como todos los pre-requisitos de LEED) ya que son exigibles para la certificación del edificio.
Con respecto a los créditos de la categoría EQ, encontramos 4 créditos relacionados con la calidad del aire interior. A continuación vamos a describir brevemente en qué consisten cada uno de estos pre-requisitos y créditos.
Pre-requisitos relacionados con la calidad del ambiente interior
En la categoría de calidad del ambiente interior dos pre-requisitos tienen que ver con la calidad del aire.
1. Eficiencia mínima de la calidad del aire interior
Establece un estándar mínimo de calidad del aire interior (IAQ), tanto con sistemas mecánicos como con sistemas de ventilación natural.
Para la ventilación mecánica:
Se debe de cumplir con las exigencias de la norma ASHRAE para la ventilación mecánica o la normativa local. Lo que sea más exigente. Y además de esto se debe monitorizar el caudal de aire exterior cuando su valor sea superior a los 472 l/s. Para caudal constante, bastará un indicador que confirme que se mantiene el caudal de aire exterior de diseño.
Si la renovación de aire es por ventilación natural:
El pre-requisito propone una de las tres opciones de cumplimiento según la normativa ASHRAE para la ventilación natural y además una de las tres estrategias de monitorización propuestas por LEED.
2. Control del humo del tabaco
LEED da mucha importancia al control del humo del tabaco (fumar en general) por sus efectos negativos sobre la salud de las personas. Con este pre-requisito se pretende minimizar la exposición de los ocupantes del edificio, las superficies y los sistemas de ventilación y distribución del aire al humo del tabaco.
La estrategia consisten en la prohibición del tabaco (o equivalente) dentro y fuera del edificio. Se delimitan las áreas fuera del edificio donde se puede fumar, lejos de aberturas, ventanas y puertas del edificio. Además se debe de comunicar las restricciones a los ocupantes del edificio.
En edificios residenciales se da dos opciones. O que no se pueda fumar en todo el edificio. O como alternativa que se pueda fumar exclusivamente en interior de viviendas y zonas exteriores privativas pero cumpliendo unos requisitos técnicos de compartimentación para evitar fugas.
Créditos de calidad del aire interior en la categoría EQ
A continuación se describen brevemente los cuatro créditos relacionados con la calidad del aire interior en la categoría EQ.
1. Estrategias mejoradas de calidad del aire interior
Las estrategias mejoradas son adicionales a las propuestas en el pre-requisito correspondiente:
- Sistemas de entrada en el suelo (felpudos) que atrapen los contaminantes que los usuarios arrastran al caminar desde el exterior.
- Mantener una presión negativa en espacios donde existan contaminantes potenciales. Por ejemplo garajes, áreas de limpieza, lavanderías, salas de fotocopias e imprenta, etc..En estos casos las puertas que comuniquen con otros espacios del edificio serán de cierre automático. Las particiones serán estancas.
- Uso de filtros de partículas o dispositivos de limpieza del aire exterior en el sistema de ventilación, hacia los espacios ocupados.
- Filtros o dispositivos de limpieza para el aire recirculado.
- Aumento de la tasa de ventilación en un 15% e incluso un 30%.
- Al menos el 75% de los espacios ocupados deben disponer de ventanas que se puedan abrir al espacio exterior.
- Ventilación natural diseñada según ASHRAE.
- Monitorizar las concentraciones de dióxido de carbono en espacios densamente ocupados.
- Control y monitoreo de otros contaminantes del aire, en espacios donde existan fuentes de contaminación además del CO2.
2. Materiales bajo emisivos
Este crédito persigue reducir las concentraciones de contaminantes químicos que afectan a la calidad del aire interior y el medioambiente. Con ello se consigue proteger la salud, la productividad y el bienestar de los instaladores y usuarios del edificio.
El crédito clasifica los materiales en 8 categorías limitando el contenido de COV y las emisiones. Se incluyen pinturas y recubrimientos, adhesivos y sellantes, suelos, sistemas de paredes y techos, aislamientos, mobiliario y materiales de madera de composite.
3. Plan de Calidad del Aire Interior durante la construcción
Se pretende promover el bienestar de los trabajadores de la construcción y los ocupantes del edificio. Para ello se diseña un plan que se debe de cumplir durante la ejecución del edificio.
Entre las estrategias contenidas en el plan destacan las siguientes:
1. Limpieza periódica durante toda la ejecución de la obra. Incluye gestión correcta de los residuos no peligrosos y peligrosos.
2. Protección de los elementos que componen el sistema de ventilación para que se contaminen durante la ejecución de la obra por estar acopiados previo a su instalación. También sellado efectivo de las aberturas del sistema de ventilación durante la ejecución para evitar su contaminación.
3. Uso de materiales bajo emisivos.
4. Uso de maquinaria eléctrica como alternativa a maquinaria que utilice combustibles fósiles.
5. Protección de los materiales de fuentes de contaminación como la humedad, el polvo, etc.
6. Prohibido fumar durante la ejecución de la obra. Espacios específicos para fumadores lejos de aberturas, puertas y ventanas, en el exterior.
7. Control del ruido y las vibraciones.
8. Empleo de filtros si se utiliza el sistema de ventilación y sustitución de los mismos.
4. Evaluación de la calidad del aire interior
El objetivo consiste en establecer una mejor calidad del aire interior después de la construcción del edificio y durante la ocupación. Con ello se consigue proteger la salud, la productividad y el bienestar de los usuarios del edificio.
Para ello el crédito establece dos opciones.
- Instalación de nuevos filtros y suministro de un caudal muy elevado de aire exterior a través del sistema de ventilación. Esta limpieza se puede realizar en una fase previa a la ocupación del edificio o previo y durante la ocupación, en dos fases.
- Medición de la calidad del aire mediante ensayo. Entre el final de obra y la ocupación del edificio. Bien para testear materia particulada (PM) y gases inorgánicos o bien para testear compuestos orgánicos volátiles.
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