Cuando diseñamos viviendas y elegimos los materiales que colocaremos en ellas, es importante ser consciente de que dicha actividad supone un impacto no sólo sobre el medio ambiente, sino también sobre la salud de las personas. Las estrategias para reducir este impacto están al alcance de todos, y todas ellas tienen que ver con tres acciones: reducir, re-utilizar y reciclar. El objetivo consiste en intentar reducir el consumo de materias primas por un lado, y reducir la generación de residuos por otro, sobre todo los que van camino directo al vertedero. Tampoco nos olvidemos del impacto que produce en el entorno, la construcción y el funcionamiento de las viviendas o edificios de viviendas, durante su vida útil ¿Conoces estas estrategias? ¿Las aplicas en tus proyectos? ¿Son efectivas? Participa con tus comentarios.
22-09-2015
Materiales
La elección de productos y materiales para la construcción de edificios, supone un impacto negativo sobre el medio ambiente, que podemos reducir. Para ellos tenemos que considerar una serie de factores, y hacernos las preguntas correctas, para realizar la selección más adecuada:
1 La localización. Tenemos que preguntarnos ¿Dónde se ha extraído la materia prima o dónde se ha fabricado este producto?¿Qué distancia han tenido que ser transportados hasta llegar al punto de consumo? ¿Cuánta energía se ha consumido para su transporte?
2 Posibilidad de re-utilizar. ¿Es posible re-utilizar un material o producto que ya exista, en lugar de adquirir uno totalmente nuevo?
3 Impacto sobre el medio ambiente. ¿Qué impacto negativo sobre el medio ambiente ha producido la extracción de los recursos para fabricar el producto que quiero?
4 Materiales rápidamente renovable. ¿En cuánto tiempo se va a regenerar o se va a restaurar el impacto sobre el medioambiente, después de la extracción de este material o producción de este producto?
5 Contenido de material reciclado. ¿Cuál es el porcentaje de material reciclado utilizado en la fabricación de este producto, en lugar de materia prima virgen extraída de nuevo?
6 Durabilidad. ¿Cuánto tiempo dura este material instalado sin necesidad de sustituirlo? ¿Que medidas preventivas y otros tipos de materiales tengo que tener en cuenta para su mantenimiento?
7 Estética. ¿Es este el aspecto estético que me gustaría mantener durante mucho tiempo?
8 Fin de vida. ¿Es posible volver a re-utilizar o reciclar o rehabilitar este producto cuando deje de servir para realizar la función por la que fue adquirido?
Ejemplo: el linóleo es una alternativa al vinilo por diversos motivos. En primer lugar, porque dura como mínimo hasta dos veces más que el vinilo, y en segundo lugar, porque está fabricado con materiales reciclados. El vinilo se fabrica con derivados del petróleo, ya que es un plástico, y requiere de un consumo alto de energía (embodied energy) en comparación con el linóleo. En cambio el linóleo está fabricado con el aceite obtenido a partir de las semillas de lino, mezclado con polvo de madera o de corcho. Es cierto que el coste de este material es más caro que el vinilo, pero los linóleos de alta calidad son extremadamente duraderos, haciéndolo más económico a largo de su ciclo de vida.
Residuos
La estrategia más efectiva para reducir la cantidad de residuos generados durante la construcción o rehabilitación de un edificio, consiste en no crear más residuos. Pero ¿Cómo se hace? Pues planificando y gestionando bien el proyecto y la ejecución de la obra, y por supuesto dedicando tiempo a calcular la cantidad exacta de materiales y productos que se necesita realmente. Reducir la cantidad de residuos, junto con reutilizar y después reciclar, son las estrategias más efectivas para reducir la cantidad de residuos que se envían al vertedero.
Por otro lado, también se puede reducir la generación de residuos en nuestros propios hogares, mediante una serie de prácticas o costumbres sencillas:
– Ir a la compra con nuestra propia bolsa re-utilizable, en lugar de adquirir cada vez bolsas de plástico o que no se puedan reutilizar o reciclar.
– Adquirir la menor cantidad de productos empaquetados. En España esto es complicado, pero ya existen países como Alemania, en los que se puede ir a comprar a tiendas donde los productos se compran a granel, evitando así envases de plástico desechables, o que no se puedan re-utilizar o reciclar. Si bien es cierto que hay envases -plástico, latas, papel o vidrio- que podemos separar, y tirar en su correspondiente contenedor, también es cierto que siempre el primer principio consiste en reducir, ya que es la estrategia más respetuosa con el medio ambiente y la salud de las personas.
– Utilizar tus propios envases para adquirir o transportar tus comida o bebidas – almuerzo, café, etc-, en lugar de envases desechables cada vez.
Integración en el medio
Por último, no podemos olvidar el hecho de que cuando se construye una vivienda o un edificio de viviendas, ésta o éste, se localiza en un entorno y lo transforma. La actividad edificatoria siempre altera de alguna manera el lugar en el que se ubica, de ahí la importancia de su integración en el medio. En la ciudades el medio ya está transformado, sin embargo también se construyen viviendas en zonas que cuentan con más espacios verdes y naturales, como puede ser cualquier urbanización a las afueras de la ciudad.
La integración en el medio se refiere a cómo nos relacionamos con el entorno a través de los edificios o viviendas que construimos y las acciones derivadas de dicha actividad, y su impacto, aunque es inevitable, se puede reducir llevando a cabo una serie de estrategias:
– Los pavimentos permeables en los espacios libres alrededor de los edificios o viviendas, permiten canalizar el agua de lluvia, directamente a través del terreno que la absorbe y la filtra. Con esta acción conseguimos por un lado, reducir la cantidad de agua escorrentía que en caso contrario, sería canalizada por la red general del alcantarillado; y por otro, se contribuye a la continuidad en el ciclo hidrológico natural del agua.
– Recursos paisajistas como lagunas biológicas o cursos de agua con vegetación (bioswale) integrados en el medio, que sirven para filtrar el agua de escorrentía eliminando contaminación y sedimentos, y donde se puede verter directamente el agua de lluvia.
Con estos recursos bien diseñados se puede reducir los efectos negativos derivados de la erosión, ya que el agua de escorrentía no sale de los límites de la parcela y es filtrada por el terreno (ciclo natural). Otros recursos naturales consisten en:
-Realizar superficies inclinadas en forma de terrazas.
– Utilizar la técnica del mantillo o mulching para retener la humedad de la vegetación y mejorar y mantener la calidad del suelo.
– Plantar superficies con vegetación autóctona y de menor necesidad de riego y mantenimiento (nunca césped), en lugar de plantas invasivas y que requieran el uso de fertilizantes y productos químicos.
– Construir vallas que retengan el material de arrastre producto de la erosión del terreno, causada por la escorrentía (agua de lluvia).
Fuente: The roots of a greener home. 15 Things you should know to make your home healthier for you and the environment
¿Te ha parecido interesante este artículo? Participa con tus comentarios y consultas justo abajo y comparte en redes sociales.
Si eres certificador energético, date de alta en nuestra web y recibe encargos directos de clientes sin intermediarios.
Aprende a realizar certificados energéticos con este curso online gratis.
Estas estrategias son sin duda la mejor herramienta para minimizar la contaminación ambiental y reducir los costos para todo ser humano poder acceder a la vivienda digna con menos efectos nocivos para el entorno. Todo se basa en el grado de educación y la concientisación del ser humano desde el seno familiar. Añadido a esto se debería contar en todos los hogares con energías alternativas (energía eólica y energía solar) para suplir necesidades básicas.